Muchas veces mi 911 soy yo, cuando lloro a escondidas y me repito lo valiente que soy y que puedo con lo que sea que se me atraviese en mi camino, me levanto y sigo.
Podrán reemplazar mi persona, pero jamas mi compañía, mi manera de ver la vida, mi manera de hacer feliz, mi lealtad y bondad. Yo doy mucho por que soy mucho, si me quieres fallar hazlo, pero recuerda que aquí no pierde el que da, pierde el que no sabe valorar.
normalicemos saber que hay decisiones correctas que nos van a romper el corazón, que hacer las cosas bien requiere muchísima más valentía que hacerlas mal, que empezar de cero da pánico, que da miedo arriesgarnos pero siempre, ser valiente y buena persona tiene su recompensa.