Ojalá algún día acepten con dignidad que no todo el mundo ama Venezuela, no la recuerdan con nostalgia (porque la pasaron muy mal) y en sus planes nunca ha estado regresar, y también está bien.
Abracen ustedes su venezolanidad y dejen a los demás en paz.
Dónde no te inviten no vayas. Estar en un sitio donde no te invitaron es dañar tu energía, porque tú subconscientemente sabes que a nadie le interesaba tu presencia en el lugar. No puedes dañar tu aura así, debes estar donde realmente tienes que estar.