“ Mmmhmh, déjame ver... ”
Recordaba haber traído unos cuantos, ¿o se los comió todos en el camino? Rebuscó en los bolsillos de su túnica y... ¡bingo! Logró encontrarlos.
“ ¡Los tengo! Ten. ”
Estiró la mano, tendiéndole todo.
Dio un pequeño brinco en su lugar, el llamado le tomó por sorpresa, pero no demoró en sonreír ampliamente al darse la vuelta y encontrarse con su amiga.
“ ¡NOAH! ”
Se acerca, rodeándola con sus brazos en un pequeño abrazo.
Levantó la mirada de su libro y cuando se encontró con el adverso, sus ojos se tornaron de un ligero tono amarillo por unos segundos, demostrando alegría al verlo.
“ ¡Lyon! ¿Quieres chocolate? ”
Le tendió la bolsita de chocolate y tras tomar uno para ella, regresó su atención al libro, pasando a la siguiente página.
“ Es sobre criaturas mágicas, ¿quieres leer conmigo? ”
“ ¡Y por poco! Regresé antes de tiempo, me alegra muchísimo verte. ”
La liberó después de unos minutos, su alegre y curiosa mirada se posa en la adversa, sin borrar la sonrisa.
“ ¿Cómo has estado? ¿De qué tanto me he perdido? ”