No hay nada más poderoso que la oración, no hay nada más fuerte que la fe y no hay nada más grande que Dios.

Prepárate, Dios te pondrá exactamente donde quisieron impedirte llegar.

Dios te vio aplaudir los logros ajenos sin envidia y por eso ahora te toca a ti.

¡Las bocas que te humillaron serán las mismas que anunciarán tu victoria!

'¡El gigante que tienes delante nunca será más grande que el Dios que llevas dentro!
1 Juan 4:4

¡Nadie vive el Propósito sin pasar por los procesos!

Esta generación no busca a Dios por lo que es, sino por lo que da. No se complacen en Dios, sino en los dones de Dios. La verdadera espiritualidad no es una búsqueda codiciosa de bendición, sino una búsqueda profunda de quien bendice.

Levántate temprano en la mañana si es necesario. Encuentra al Señor en las primeras horas de la mañana y no lo perderás de vista en el resto del día.

¡Mira desde la perspectiva de Dios y verás que Dios siempre hace todas las cosas para el bien de quienes lo aman!

José no entendía el proceso por el que estaba pasando, pero decidió confiar en Dios. Job tampoco entendió el proceso, pero decidió confiar en Dios. No es necesario que comprendas tu proceso, pero no pierdas la fe.
Todo coopera para tu bien. ¡Mantente firme en tu propósito!

A veces Dios te pone en una temporada de soledad para que puedas darte cuenta de que todo lo que necesitas es a Él. A veces, Dios nos permite enfrentar las batallas solos para que podamos ver Su mano protegiéndonos y guiándonos en todo.

Todo milagro en la Biblia surgió de un problema que ya no tenía solución. ¡No pierdas la fe, porque Dios actúa hasta el límite!

Cuando conoces a Jesús, todo cambia.

Sana tu pasado para arreglar tu futuro.

Ezequiel caminó por el valle pero no pisó los huesos.
Quien es de Dios no pisa a los que han caído, sino que suelta una palabra para que los caídos se vuelvan a levantar.

¡Encuentra el perdón pleno en Cristo y vive en la libertad de los hijos de Dios!

A veces no es el silencio de Dios. A veces es la falta de intimidad para reconocer Su voz.

Ora cuando te vayas a dormir, ora al despertar. Orar es tan importante como respirar, pero nunca olvides que la mejor oración es amar.

Ora como nunca has orado, para que vivas lo que nunca has vivido.

Nuestro idioma debe ser una fuente de vida, no un pozo de muerte; debe ser medicina, no veneno; Tiene que ser un bálsamo que consuele, no un fuego que destruya.