Grande es el Señor nuestro y de mucho poder;su entendimiento es infinito. Salmo 147:5

Que el Dios de la esperanza los llene de toda alegría y paz a ustedes que creen en él, para que rebosen de esperanza por el poder del Espíritu Santo. Romanos 15:13

El Señor te protegerá; de todo mal protegerá tu vida. El Señor te cuidará en el hogar y en el camino, desde ahora y para siempre. Salmo 121:7-8

Mantengamos firme la esperanza que profesamos, porque fiel es el que hizo la promesa. Hebreos 10:23

Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados. Romanos 8:28

El que habita al abrigo del Altísimo morará a la sombra del Omnipotente. Salmos 91:1

Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. Mateo 6:33

Todo lo puedo en Cristo que me fortalece. Filipenses 4:13

Y aunque tu principio haya sido pequeño, Tu postrer estado será muy grande. Job 8:7

Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que cualquier espada de dos filos; penetra hasta la división del alma y del espíritu, de las coyunturas y los tuétanos, y es poderosa para discernir los pensamientos y las intenciones del corazón. Hebreos 4:12

Adora al Señor tu Dios, y él bendecirá tu pan y tu agua. Yo apartaré de ustedes toda enfermedad. Éxodo 23:25

Benditas serán tu canasta y tu artesa de amasar. Deuteronomio 28:5

Hacia ti extiendo las manos; me haces falta, como el agua a la tierra seca.  Salmo 143:6

La bendición de Jehová es la que enriquece, Y no añade tristeza con ella. Proverbios 10:22

Estad siempre gozosos. Orad sin cesar. Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús. 1 Tesalonicenses 5:16-18

El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy. Mateo 6:11

No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal. Romanos 12:21

Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora. Eclesiastés 3:1

Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados. Romanos 8:28

Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. Mateo 6:33