Tres grupos de lectores y lectoras se resistieron al cierre. Uno, del Quijote: el padre de María vive en Venezuela, tiene 95 años y es librero ¡su librería se llama El Quijote! Durante las sesiones hacemos una lista de preguntas para hacérselas llegar.
La penúltima y nos vamos. Leímos Dorayaki y vimos la película. Un clásico: lo imaginaba así o tan distinto. Preparamos los affogatos más deliciosos del mundo y lloramos. Fue hermoso.