'Nunca se cansen de orar y pedir lo que quieren para sus vidas, porque Dios escucha. Todo llega en el momento justo y de una manera más increíble de lo que esperábamos'.
Le pido tanto a Dios que me de sabiduría en mis planes, que me de paciencia y calma a la hora de actuar. Tengo la costumbre de querer todo al tiempo, todo en el momento que quiero. Se me olvida que no somos nosotros los que elegimos el momento adecuado, sino él.
Al final los verdaderos lujos son la salud, el tiempo, la buena compañía, las mañanas tranquilas y la libertad de elegir con quien quieres estar, y que quieras hacer.