Yo te perdono lo que sea. Menos lo que sabías que me iba a doler y lo hiciste igual.

Mayo con M de: Me dolió, pero en realidad me lo esperaba.

Tener una conversación con alguien sobre cómo te sientes nunca debería de ser motivo de discusión.

Lo hice con amor. No me debes nada.

Jamás se debe traicionar a alguien que siempre te acompañó en las malas.

Yo también te pude hacer lo mismo. Pero yo sí pensé en cómo te podías sentir.

El tiempo dirá. Siempre lo hace.

Se habla mucho de la primera impresión, pero cuidado con la última. Dice mucho más de una persona cómo se va que cómo llega.

El enfado se pasa. La decepción se queda.

Y ahora somos dos extraños que se conocen muy bien.

Abril con A de: Aprende a poner límites. Ser buena persona no significa aguantarlo todo.

Te equivocaste. Pero no te lo diré yo, te lo dirá el tiempo.

Todo pasa. Y todo enseña.

No olvides que conocí lo peor de ti. Y no me fui.

A toda decepción le llega su olvido.

Soltar duele. Pero sostener lo insostenible duele más.

Ojalá la gente entendiese que la salud mental es tan importante como la física.

Es imposible sanar si sigues fingiendo que no estás herido.

Te podré querer mucho. Pero si hay que soltar, se suelta.

Sanarás. Y volverás mucho más fuerte.